Lectio Divina por Anthony Velazco Arismendiz de Panamá.
Invocación:
Espíritu Santo, abre los cielos, manda tu fuego, derrama tu unción. Te necesito. Amen.
Lectura del santo evangelio según san Mateo 9, 14-15
En aquel tiempo, los discípulos de Juan se le acercan a Jesús, preguntándole: «¿Por qué nosotros y los fariseos ayunamos a menudo y, en cambio, tus discípulos no ayunan?». Jesús les dijo: «¿Es que pueden guardar luto los amigos del esposo, mientras el esposo está con ellos? Llegarán días en que les arrebatarán al esposo, y entonces ayunarán». Palabra del Señor.
Lectura: ¿Qué dice el texto?
Es un texto sencillo que manifiesta un dialogo entre Jesús y los discípulos de Juan el Bautista. Estos contrariados al ver que los discípulos de Jesús no guardan el ayuno prescrito, son interpelados por Jesús quien les cuestiona sobre la necesidad de ayunar en tiempo de fiesta.
Dato: a pesar que el ayuno de la antigua Alianza era visto como herramienta para la humildad y ser más receptivo a Dios, podía ser usado de una manera equivocada (Isa. 58, 4-6), y se puede practicar sin ninguna devoción (Zac. 7,5). Al cuestionar sobre el ayuno, Jesús, trae esta situación a debate.
Meditación: ¿Qué me dice Dios en el texto?
Al interrogar sobre la cuestión del ayuno que manifiestan los discípulos de Juan, Jesús, plantea dudas sobre la misma base del ayuno ¿En serio es necesario ayunar? Justo antes el versículo 13 Jesús dice: “Misericordia quiero, pero no sacrificio…” ¿De qué sirve tanta mortificación corporal, tanto ritualismo, tanta liturgia si al final no se traducen en amor al prójimo, a la naturaleza, a mí mismo, a Dios? Serian prácticas sin sentido, SIN ESPIRITU. Sí es necesario ayunar, pero nuestro ayuno debe tener sentido.
Es crucial en esta Cuaresma fortalecer las prácticas con sentido, CON ESPIRITU. Si se ayuna que sea compartir con el prójimo, si oro que sea para AMAR MÁS, si camino, hablo o realizo quehaceres que todo lo que se haga sea para amar. Para esto se requiere autenticidad; cero hipocresía litúrgica. Jesús está con nosotros, por tanto nuestras obras deben manifestar esa alegría que significa tenerlo en el corazón.
Oración: ¿Qué le respondo a Dios?
Líbrame de la hipocresía, Señor, de las obras sin sentido que me consumen en una espiral de mentiras que me mienten y buscan manipularte. Ayúdame a perseverar en las prácticas de vida sinceras y con sentido. Amen.
Contemplación: ¿Cómo interiorizamos la palabra de Dios?
¿Es que pueden guardar luto los amigos del esposo, mientras el esposo está con ellos?
Acción: ¿A qué nos comprometemos con Dios?
Obrar con sincera autenticidad.