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Lectio Divina por Carmen Amelia Reyes Liscano de Venezuela
Invocación al Espíritu Santo
Ven Espíritu Santo de Dios, toma poder de nuestras acciones, nuestros pensamientos y nuestros deseos. Dirige tu fuego abrasador a nuestros corazones y permite que en nuestra vida reflejemos siempre la voluntad de tu Palabra para que así podamos acercarnos a la santidad
Cantemos juntos:
Lectura Mateo 13, 36-43
En aquel tiempo, Jesús dejó a la gente y se fue a casa. Los discípulos se le acercaron a decirle:
-«Acláranos la parábola de la cizaña en el campo.» Él les contestó:
-«El que siembra la buena semilla es el Hijo del hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos del reino; la cizaña son los partidarios del Maligno; el enemigo que la siembra es el diablo; la cosecha es el fin del tiempo, y los segadores los ángeles. Lo mismo que se arranca la cizaña y se quema, así será al fin del tiempo: el Hijo del hombre enviará a sus ángeles, y arrancarán de su reino a todos los corruptores y malvados y los arrojarán al horno encendido; allí será el llanto y el rechinar de dientes. Entonces los justos brillarán como el sol en el reino de su Padre. El que tenga oídos, que oiga.»
En el capítulo 13 del evangelio de Mateo encontramos 13 parábolas que nos hablan del Reino de Dios. Jesús habla en parábolas para cumplir lo anunciado por el profeta Hablaré en parábolas, anunciaré cosas que estaban ocultas desde la creación del mundo
Las parábolas son expresiones literarias que utilizan la metáfora y la comparación para generar mensajes y reflexiones significativas. Jesús hace uso de ellas en un sentido pedagógico para acercar a la multitud el dinamismo de Dios y luego, como en el caso de este pasaje del Evangelio, reserva a sus discípulos la explicación de lo que estos relatos quieren decir, al final, dice «El que tenga oídos que oiga», lo cual demuestra que solo aquellos que estén abiertos a la acción del Espíritu podrán ser parte de la verdad revelada.
Meditación
Después de leer la explicación de la parábola del Trigo y la Cizaña, nos preguntamos:
¿Por qué Jesús quiere que permanezcan trigo y cizaña juntos hasta el final? ¿Qué tipo de semilla soy? ¿En mi vida cotidiana actuó como trigo o cizaña? Y si soy trigo ¿Permanezco junto a la cizaña o la aparto de mi camino? Y si soy cizaña ¿Qué puedo hacer para morir y nacer como trigo nuevo?
Oración
Señor Jesús, Maestro Bueno, tú has querido que sea siempre semilla buena en medio del mundo, a veces creo que soy trigo otras tantas creo que soy cizaña, te pido perdón Señor porque quiero reflejar en mi vida mi adhesión a ti y a tu llamado de amor, pero en ocasiones dejo que el maligno haga su siembra en mi corazón. Te pido Señor que me llames a tu Reino, que ame siempre tu justicia y practique la búsqueda de la Verdad, para que pueda resplandecer como el sol en el Reino del Padre. Amén
Contemplación
Los justos resplandecerán como el sol en el Reino de su Padre
Acción
Me comprometo a practicar la justicia desde las acciones más pequeñas: en el trabajo, en la familia, con mis amigos y vecinos; preguntándome siempre: ¿Qué haría Jesús en mi lugar?
