Evangelio del día – Lectio Divina Mateo 7, 21-29

Lectio Divina por Javier Cano de USA

Invocación al Espíritu Santo.

Ven Espíritu Santo manda tu luz desde el cielo. Padre amoroso fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo, brisa en las horas del fuego, gozo que enjuaga las lagrimas y reconforta en los duelos. Entra hasta el fondo de nuestras almas y enriquécenos con tu amor. Mira nuestro vacío y llénanos de ti. Ven Espíritu Santo y enciende en nosotros el fuego de tu amor por Jesucristo nuestro señor. Amen.

Lectura del santo evangelio según san Mateo 7,21-29

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «No todo el que me dice “Señor, Señor” entrará en el reino de cielos, sino el que cumple la voluntad de mi Padre que está en el cielo. Aquel día muchos dirán: “Señor, Señor, ¿no hemos profetizado en tu nombre, y en tu nombre echado demonios, y no hemos hecho en tu nombre muchos milagros?” Yo entonces les declararé: “Nunca os he conocido. Alejaos de mí, malvados.” El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica se parece a aquel hombre prudente que edificó su casa sobre roca. Cayó la lluvia, salieron los ríos, soplaron los vientos y descargaron contra la casa; pero no se hundió porque estaba cimentada sobre roca. El que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica se parece a aquel hombre necio que edificó su casa sobre arena. Cayó la lluvia, se salieron los ríos, soplaron los vientos y rompieron contra la casa, y se hundió totalmente.»
Al terminar Jesús este discurso, la gente estaba admirada de su enseñanza, porque les enseñaba con autoridad, y no como los escribas.

Palabra del señor.

MEDITACIÓN: Que me dice el texto?

Este texto nos muestra que no podemos brincar o abreviar los planes de Dios en nuestra existencia. Es necesario esperar y confiar que el tiempo de Dios es diferente de lo nuestro. Por eso, no basta saber de memoria las enseñanzas de la Sagrada Escritura o la doctrina de la Iglesia, sin un compromiso efectivo. La confianza no significa solo decir: “Señor, Señor”, sino poner en obra su Palabra. De nada sirve ir a la misa todos los días, recibir la comunión, pagar el diezmo y hacer obras de caridad, si en nuestra vida, nuestros proyectos y nuestras actitudes no están conformes a lo que Jesús vivió y enseñó. De que nos sirve decir “Señor, Señor”, si criticamos a nuestros hermanos y desobedecemos a nuestros padres. No basta con solo ir a misa, comulgar o saber la palabra de Dios, si no la ponemos en práctica. Pidamos el don del discernimiento, para que sepamos cual es la voluntad de Dios y el don de la paciencia, para saber esperar el tiempo de Dios en nuestra vida.

ORACIÓN: Que le respondo al señor.

Señor, te pido que me des más abre de ti. Que no me baste con solo escuchar tu palabra, sino que también la ponga en práctica, para que pueda ser cada más semejante a ti. Que yo sea como el hombre que edifico su casa sobre la roca que a pesar de la tempestad su casa nunca cayo. Haz que mi fe nunca caiga, Señor tu eres tan grande y yo tan pequeño, inúndame con tu amor infinito, y no permitas que caiga en la tentación. Amen.

CONTEMPLACIÓN: ¿Como interiorizo la Palabra de Dios?

«No todo el que me diga: ‘¡Señor, Señor!’, entrará en el Reino de los cielos, sino el que cumpla la voluntad de mi Padre, que está en los cielos.

ACCIÓN ¿A que me comprometo?

Te invito a que autoanalises: ¿Dónde está construida mi fe? ¿En la roca o en la arena? ¿Estoy preparado para la tempestad?

Acerca de Javier Cano México

Ver tambíen

Evangelio del día – Lectio Divina Mateo 1, 1-17

Lectio Divina Martes, 17 de Diciembre de 2024 III Semana de Adviento Ciclo C Hugo …

Deja una respuesta

× WhatsApp / Cristonautas - Clic aquí