Lectio Divina por Diego A. Nagera de Guatemala
INVOCACIÓN AL ESPIRITU SANTO
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles, y enciende en ellos el fuego de tu amor. Envía tu Espíritu Creador y renueva la faz de la tierra.
Amén
Evangelio † Lectura del santo Evangelio según san Mateo (24, 42-51)
Gloria a ti, Señor.
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Velen y estén preparados, porque no saben qué día va a venir su Señor. Tengan por cierto que si un padre de familia supiera a qué hora va a venir el ladrón, estaría vigilando y no dejaría que se le metiera por un boquete en su casa. También ustedes estén preparados, porque a la hora en que menos lo piensen, vendrá el Hijo del hombre. Fíjense en un servidor fiel y prudente, a quien su amo nombró encargado de toda la servidumbre para que le proporcionara oportunamente el alimento. Dichoso ese servidor, si al regresar su amo, lo encuentra cumpliendo con su deber. Yo les aseguro que le encargará la administración de todos sus bienes. Pero si el servidor es un malvado, y pensando que su amo tardará, se pone a golpear a sus compañeros, a comer y emborracharse, vendrá su amo el día menos pensado, a una hora imprevista, lo castigará severamente y lo hará correr la misma suerte de los hipócritas. Entonces todo será llanto y desesperación”. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Lectura ¿Qué dice el texto?
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Velen y estén preparados, porque no saben qué día va a venir su Señor. Tengan por cierto que si un padre de familia supiera a qué hora va a venir el ladrón, estaría vigilando y no dejaría que se le metiera por un boquete en su casa. También ustedes estén preparados, porque a la hora en que menos lo piensen, vendrá el Hijo del hombre.
Meditación, ¿Qué nos dice Dios en el texto?
En este evangelio el Señor nos habla de “vigilancia”. ¿Por qué hemos de estar vigilantes? Porque alguien importante va a llegar y debemos estar atentos a recibirlo. Ese personaje importante que va a llegar no es un enemigo, no es un fantasma, es Jesús, mi amigo, mi tesoro, mi vida. Este nos ha enviado a “trabajar en su viña”. La mejor manera de esperarlo es trabajando a gusto, estando contentos y satisfechos con aquello que hacemos.
Oración, ¿Qué le decimos a Dios?
Señor permítenos estar dispuestos y vigilantes para que al momento de tu llegada te podamos contemplar con amor y te podamos abrir las puertas de nuestro corazón y poderte servir de la mejor manera. No permitas que seamos hipócritas y que siempre realicemos nuestro trabajo, haciendo tu voluntad siempre y no la nuestra.
Contemplación, ¿Cómo interiorizamos la Palabra de Dios?
REPITAMOS Y RECORDEMOS ESTÁS PALABRAS…
“Velen y estén preparados, porque no saben qué día vendrá nuestro señor”
“Velen y estén preparados, porque no saben qué día vendrá nuestro señor”
“Velen y estén preparados, porque no saben qué día vendrá nuestro señor”
Acción, ¿A qué me comprometo con Dios?
Señor, con está lectura me comprometo a estar preparado y atento para la hora de tu llegada así también permíteme servirte de una mejor manera ya sea en mi trabajo, escuela, iglesia o incluso dentro de mi propio núcleo familiar.