Lectio Divina
Erika Iris Varela Cortes
Colombia-Valle del Cauca ✍🏻🇨🇴
Invocación al Espíritu Santo
Ven Espíritu Santo
Infunde tu amor y misericordia en todos nosotros.
Revístenos de sabiduría y entendimiento para
comprender y aplicar las Sagradas Escrituras. Amén.
Evangelio según
San Mateo 18, 21-35, 19-1
No te digo que perdones hasta 7 veces, sino hasta 70 veces 7. Entonces Pedro vino a Jesús y le preguntó: “Señor, ¿cuántas veces debo perdonar a mi hermano que peca contra mí? ¿Siete veces?” 22 Le respondió Jesús: “No debes perdonar siete veces, sino setenta veces siete. 23 Porque el Reino de los Cielos es como un rey que decidió saldar cuentas con sus empleados. 24 Al comenzar a saldar las cuentas, le trajeron a uno que le debía muchos millones de monedas de oro. 25 Pero el empleado no tenía dinero para pagar, así que el señor ordenó que el empleado, su esposa e hijos se vendieran como esclavos y que todo lo que poseían también se vendiera para saldar la deuda. 26 Entonces el empleado se arrodilló ante él diciéndole: ‘Tenga paciencia conmigo, y le pagaré todo’. 27 El señor se compadeció de aquel empleado, le perdonó la deuda y lo dejó ir. 28 Al salir de allí, aquel empleado encontró a uno de sus compañeros de trabajo que le debía cien monedas de plata. Lo agarró por el cuello y comenzó a sacudirlo, diciéndole: ‘¡Págame lo que me debes!’ 29 Entonces su compañero se arrodilló y le rogó: ‘Ten paciencia conmigo, y te lo pagaré todo’. 30 Pero él no quiso, sino más bien lo hizo meter en la cárcel hasta que pagara la deuda. 31 Cuando los otros empleados vieron lo que había sucedido, se entristecieron profundamente y fueron a contarle todo al señor. 32 Entonces el señor llamó a ese empleado y le dijo: ‘¡Empleado malvado! Te perdoné toda aquella deuda porque me lo suplicaste. 33 Por tanto, deberías también sentir compasión por tu compañero, como yo me compadecí por ti’. 34 El señor, estando muy enojado, lo envió a la cárcel para que lo castigaran hasta que pagara toda la deuda”. 35 De la misma manera, mi Padre, que está en los cielos, hará con ustedes si cada uno no perdona sinceramente a su hermano”.
Palabra del Señor.
Meditación
Perdonar de corazón ofrece cierta resistencia a ser entendido. ¿Qué significa? Tomemos en cuenta la simbología plasmada en la lectura del número 7, el número 7 para el pueblo judío, significa la plenitud de todo cuanto existe, lo evidenciamos en el libro del Génesis, en el relato de la creación, donde el Señor cesa de crear cosas materiales y santifica, el Señor reposa al séptimo día.
¿Cuántas veces debo perdonar al hermano que peca en contra de mi, 7 veces?
Una pregunta que el Señor no responde de manera conceptual. La preocupación de Pedro es cuantitativa y hace dos preguntas al Señor. Primero pregunta: “¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí?” (v. 21). Pero Pedro intuye que el Señor tiene algo más que decir al respecto, y de allí que inmediatamente después formule la segunda pregunta: “¿Hasta siete?” (v. 21). El Talmud Babilónico señala que se debe perdonar hasta tres veces la misma ofensa del ofensor. pregunta: “¿Hasta siete?” Jesús responde: “No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete” (v. 22). Y esta respuesta, “setenta veces siete,” desborda todo lo imaginado. Supone el valor simbólico del número “7,” pero Jesús lo aumenta hasta la exageración. ¿Cuál es el sentido de la respuesta del Señor? El Maestro procede a contar una parábola que da por sentada la cultura esclavista en la que entonces vivían sus oyentes. nos da la clave de interpretación. Pedro ha formulado su pregunta inicial interesado quizá por dar satisfacción a su impaciencia o intolerancia ante los agravios constantes cometidos por quienes lo rodean. Pedro acepta y cree que debe perdonarse al hermano que ofende. Pero, ante la eventualidad de ofensas constantes o deliberadas por el mismo ofensor, ¿Cómo debe administrarse el perdón? Pedro entiende que ante esta eventualidad debe haber, por lógica, otro procedimiento. De allí la pregunta de si hasta siete veces. Y es entonces cuando el Señor responde: “hasta setenta veces siete,” 3 y procede después a narrar la parábola para ilustrar su respuesta.
Contemplación
Señor, que podamos perdonar como Tú perdonas, y liberarnos de la carga pesada que contiene el rencor.
Acción
Que podamos dejar la testarudez de no perdonar y soltar la pesada e inútil carga que llevamos en nuestra espalda, en nuestra conciencia, perdonar y acepta como Dios Padre lo hace.