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LECTIO DIVINA
Martes, 10 de diciembre de 2024
II SEMANA DE ADVIENTO
Greicy Ramírez Aldana de Colombia ✍🏻🇨🇴
Invocación al Espíritu Santo
Ven, Espíritu Santo,
llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.
Envía tu Espíritu y todo será creado, y renovarás la faz de la tierra.
Oh Dios, que has instruido los corazones de tus fieles con la luz del Espíritu Santo, concédenos que, guiados por este mismo Espíritu, sepamos gustar del bien y gozar siempre de su consuelo.
Por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Evangelio según san Mateo 18, 12-14
«¿Qué les parece? Si un hombre tiene cien ovejas y se le pierde una, ¿acaso no deja las noventa y nueve en los montes y va en busca de la extraviada? Y si llega a encontrarla, les aseguro que se alegrará más por esa que por las noventa y nueve que no se extraviaron. Del mismo modo, el Padre de ustedes.
Palabra del Señor
Lectura, ¿Qué dice el texto?
Este pasaje nos revela la inmensa misericordia y el amor personal de Dios por cada uno de nosotros. A pesar de tener muchas «ovejas», el pastor deja todo para buscar la que se ha perdido. Esto simboliza cómo Dios no se resigna ante nuestras caídas o extravíos, sino que sale activamente a nuestro encuentro, buscando nuestra conversión y regreso a Él.
Meditación, ¿Qué me dice el texto?
1. Dios siempre está atento a ti: Aunque sientas que te has alejado o fallado, Dios no te olvida. Al contrario, Él toma la iniciativa y te busca, como el pastor que deja todo para encontrar a la oveja perdida. Su amor es personal y específico para cada uno.
2. Tu vida tiene un valor infinito: Aunque seas uno entre muchos, para Dios eres único y especial. Tu vida es tan importante que su alegría es inmensa cuando vuelves a Él.
3. La misericordia supera el juicio: Este texto muestra el corazón compasivo de Dios, que no se enfoca en reprochar el error, sino en rescatar y celebrar el regreso de quien se había extraviado.
4. Un llamado a confiar y regresar: Si sientes que estás lejos de Dios, este mensaje es una fuente de consuelo y esperanza.
Te recuerda que siempre hay un lugar para ti en el corazón de Dios y una oportunidad para empezar de nuevo.
Oración, ¿Qué le digo a Dios?
Señor, mi Dios, Tú que eres el Buen Pastor, gracias por buscarme siempre, incluso cuando me pierdo en mis dudas, errores o temores. Tú nunca te rindes conmigo, y tu amor es más grande que cualquier distancia que pueda separarme de ti. Hoy quiero abrir mi corazón a tu abrazo, dejarme encontrar y guiar por tu luz.
Llévame de regreso a tu camino y ayúdame a confiar siempre en tu misericordia. Enséñame también a amar como Tú amas, a preocuparme por quienes necesitan esperanza y a ser una mano amiga para quienes se sienten lejos de Ti. Gracias Señor, porque me valoras, porque celebras mi vida y porque nunca me dejas solo.
Amén.
Contemplación, ¿Cómo interiorizo la Palabra de Dios?
Gracias Señor, por amarme como soy, por buscarme siempre, y por llenarme de tu alegría cuando regreso a Ti. Ayúdame a ser reflejo de tu amor en el mundo.»
* ¿Cómo puedes mostrar ese amor de «Buen Pastor» a otros?
* ¿Qué actitud o acción puedes cambiar para acercarte más a Dios?
Acción, ¿A qué me comprometo con Dios?
Señor, esta semana me comprometo a acercarme a alguien que esté pasando por un momento difícil para mostrarle tu amor y acompañarlo en su camino. Ayúdame a ser un reflejo de tu cuidado y misericordia.
