Lectio Divina por Jesús Roel Castillo de México
Buen día hermanos les comparto la Lectio del día de hoy
Dios me los bendiga a cada uno de ustedes.
Invocación al Espíritu Santo 🕊
¡Oh Espíritu Santo!, llena de nuevo mi alma con la abundancia de tus dones y frutos. Haz que yo sepa, con el don de Sabiduría, tener este gusto por las cosas de Dios que me haga apartar de las terrenas.
Que sepa, con el don del Entendimiento, ver con fe viva la importancia y la belleza de la verdad cristiana.
Que, con el don del Consejo, ponga los medios más conducentes para santificarme, perseverar y salvarme.
Que el don de Fortaleza me haga vencer todos los obstáculos en la confesión de la fe y en el camino de la salvación.
Que sepa con el don de Ciencia, discernir claramente entre el bien y el mal, lo falso de lo verdadero, descubriendo los engaños del demonio, del mundo y del pecado.
Que, con el don de Piedad, ame a Dios como Padre, le sirva con fervorosa devoción y sea misericordioso con el prójimo.
Finalmente, que, con el don de Temor de Dios, tenga el mayor respeto y veneración por los mandamientos de Dios, cuidando de no ofenderle jamás con el pecado.
Lléname, sobre todo, de tu amor divino; que sea el móvil de toda mi vida espiritual; que, lleno de unción, sepa enseñar y hacer entender, al menos con mi ejemplo, la belleza de tu doctrina, la bondad de tus preceptos y la dulzura de tu amor. Amén.
Lectura 📖
Lectura del santo evangelio según san Mateo (13,36-43):
En aquel tiempo, Jesús dejó a la gente y se fue a casa. Los discípulos se acercaron a decirle: «Acláranos la parábola de la cizaña en el campo.»
Él les contestó: «El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos del Reino; la cizaña son los partidarios del Maligno; el enemigo que la siembra es el diablo; la cosecha es el fin del tiempo, y los segadores los ángeles. Lo mismo que se arranca la cizaña y se quema: así será el fin del tiempo: el Hijo del Hombre enviará a sus ángeles y arrancarán de su Reino a todos los corruptores y malvados y los arrojarán al horno encendido; allí será el llanto y el rechinar de dientes. Entonces los justos brillarán como el sol en el Reino de su Padre. El que tenga oídos, que oiga.»
Palabra del Señor
Meditación 🙇♂
¿Qué me dice el texto?
Queridos hermanos en el Evangelio de hoy nos damos cuenta como los apóstoles le piden a Jesús que les explique la parábola de la cizaña en esta parábola quedan muy bien definidos los roles del bien y del mal. “El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre” así cómo “El enemigo que la siembra es el Diablo”. Que queden las cosas claras desde el principio: no hay dos campos distintos: uno para el trigo y otro para la cizaña. El trigo y la cizaña crecen juntos en el campo de nuestro propio corazón. ¿Quién es capaz de decir que él es trigo puro sin mezcla de cizaña? Sólo aquella persona que no se dispone a ser cómo los demás esas personas que se ponen a darle gracias a Dios por ser únicos.
¿A caso habrá cosa más bella en este mundo que considerarse igual que los demás? Sin complejos de superioridad, porque “nadie es más que nadie”, pero también sin complejos de “inferioridad”, nadie es menos que nadie. Debemos aceptarnos todos como “hermanos” amarnos cómo hermanos con defectos y virtudes; con nuestro trigo y nuestra cizaña a cuestas, pero hermanos; con nuestra enorme capacidad de bien y también de mal, pero hermanos; con nuestro realismo, pero también con nuestras utopías, pero hermanos, al fin y al cabo para Dios todos somos iguales y perfectos. Ningún instrumento de mal, por refinado que sea, podrá matar nuestros sueños. El autor del mal está ahí, es el Maligno. El autor del bien también está ahí, es Jesucristo y es decisión de cada uno tomar nuestro camino, que Dios en este día sea ese camino que elijamos.
Hoy como se nos dice el mal está con nosotros y nosotros mismos debemos de elegir ya que ese mal es el que siembre la duda la desesperanza, el mal es astuto y nosotros a veces tenemos mucha prisa en juzgar, clasificar, poner aquí a los buenos, allí a los malos… pero Dios nuestro padre es un Dios de Misericordia y desde su trono mira en el “campo” de la vida de cada persona con paciencia y misericordia: ve mucho mejor que nosotros el mal, pero ve también las semillas del bien y espera con confianza que maduren y den buen fruto. Dios es paciente, sabe esperar. Nuestro Dios es un Padre paciente que siempre nos espera y nos espera con el corazón en la mano para acogernos, para perdonarnos y con su misericordia darnos una nueva oportunidad.
Oración 🙏
¿Qué le respondemos al señor?
Señor Jesús en este día te pido que seamos esa semilla que pueda germinar y dar buenos frutos para tu reino, haznos dóciles y sensibles a tu llamado para que podamos a través de tu palabra dar a conocer los privilegios que tenemos al ser hijos tuyos, envíanos tú espíritu consolador para que nos infunda la chispa de la verdad y a través de él seamos esos instrumentos de tu verdad. Arráncanos la cizaña que tengamos dentro de cada uno de nosotros para que con amor demos amor a nuestros hermanos.
Contemplación 😊
Para este momento de la contemplación cito la siguiente:
«El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos del Reino; la cizaña son los partidarios del Maligno; el enemigo que la siembra es el diablo; la cosecha es el fin del tiempo, y los segadores los ángeles».
Acción 🏃♂🏃♀
Para este momento de la acción me gustaría invitarlos a realizar la siguiente dinámica ir con el hermano que estas en conflicto darle un abrazo y darle gracias por estar en tu vida; por ser hijo de Dios.