Lectio Divina por Jesús Roel Castillo de México
Invocación al Espíritu Santo 🕊
Espíritu Santo, inspíranos, para que pensemos santamente. Espíritu Santo, incítanos, para que obremos santamente. Espíritu Santo, atráenos, para que amemos las cosas santas. Espíritu Santo, fortalécenos, para que defendamos las cosas santas. Espíritu Santo, ayúdanos, para que no perdamos nunca las cosas santas.
Amén
Lectura 📖
Evangelio según San Marcos 2, 23-28
Sucedió que un sábado Jesús atravesaba un sembrado, y sus discípulos, mientras caminaban, iban arrancando espigas. Los fariseos le preguntan: «Mira, ¿por qué hacen en sábado lo que no está permitido?». Él les responde: «¿No habéis leído nunca lo que hizo David, cuando él y sus hombres se vieron faltos y con hambre, como entró en la casa de Dios, en tiempo del sumo sacerdote Abiatar, comió de los panes de la proposición, que sólo está permitido comer a los sacerdotes, y se los dio también a los que estaban con él?». Y les decía: «El sábado se hizo para el hombre y no el hombre para el sábado; así que el Hijo del hombre es señor también del sábado».
Meditación 🙇🏻
Las tres grandes instituciones de los judíos eran el Templo, como consagración del espacio para Dios; el sábado, como consagración del tiempo; y la Ley, como expresión de la voluntad de Dios. Pero las tres instituciones han sido deformadas por el hombre. El sábado dejó de ser día de descanso para estar con Él y servir a los hombres. El Templo se convirtió en “lugar seguro” para cometer impunemente todo tipo de injusticias; y la Ley, instrumento de libertad y de vida, se convirtió en carga pesada y fuente de esclavitud. Jesús no podía estar de acuerdo con esa manera de entender la religión. Y dijo la frase más escandalosa para los fariseos de todos los tiempos, pero la más bella para toda la humanidad. “El sábado se hizo para el hombre y no el hombre para el sábado”. Las leyes son para servir al hombre y no para esclavizarlo. Sólo con el cumplimiento de esta ley desaparecería todo fanatismo, toda intransigencia, todo fundamentalismo. El hombre dejaría de ser “lobo para el hombre” y se convertiría en hermano.
La ley existe para el bien de las personas. En el día de sábado, los discípulos pasan por las plantaciones y se abren camino arrancando espigas. En Mateo 12,1 se dice que tenían hambre. Invocando la Biblia, los fariseos critican la actitud de los discípulos. Sería una trasgresión de la ley del Sábado (cf. Ex 20,8-11). Jesús responde invocando la misma Biblia para mostrar que los argumentos de los demás no tienen fundamento. Recuerda que el mismo David hizo algo prohibido, ya que sacó los panes consagrados del templo y los dio de comer a los soldados que tenían hambre (1 Sam 21,2-7). Y Jesús termina con dos frases importantes: (a) El sábado ha sido hecho para el hombre, y no el hombre para el sábado (b) ¡El Hijo del Hombre es dueño del sábado!
El sábado es para el ser humano, y no el ser humano para el sábado. Durante más de quinientos años, desde el tiempo del cautiverio en Babilonia hasta la época de Jesús, los judíos habían observado la ley del sábado. Esta observancia secular se volvió para ellos en una fuerte señal de identidad. El sábado era rigurosamente observado. En la época de los Macabeos, hacia la mitad del siglo II antes de Cristo, esta rígida observancia llegó a un punto crítico. Atacados por los griegos en día de sábado, los rebeldes Macabeos preferían dejarse matar y no transgredir el sábado usando las armas para defender su vida. Por esto, murieron mil personas (1Mac 2,32-38).
Reflexionando sobre esta masacre, los líderes macabeos concluyeron que debían resistir y defender su vida, aunque fuera sábado (1Mac 2,39-41). Jesús tuvo la misma actitud: relativizar la ley del sábado a favor de la vida, pues la ley existe para el bien de la vida humana, y no ¡el contrario!
¡El Hijo del Hombre es dueño del sábado! La nueva experiencia de Dios como Padre/Madre hace que Jesús, el Hijo del Hombre, diera una llave para descubrir la intención de Dios que está en el origen de las leyes del Antiguo Testamento. Por esto, el Hijo del Hombre, es dueño hasta del Sábado. Al convivir con el pueblo de Galilea, durante treinta años y sintiendo en su piel la opresión y la exclusión a que tantos hermanos y hermanas estaban condenados en nombre de la Ley de Dios, Jesús percibió que esto no podía ser el sentido de aquellas leyes. Si Dios es el Padre, entonces acoge a todos como hijos e hijas. Si Dios es Padre, entonces tenemos que ser hermanos y hermanas unos de otros. Fue lo que Jesús vivió y rezó, desde el comienzo hasta el fin. La Ley del Sábado debe estar al servicio de la vida y de la fraternidad. Fue por su fidelidad a este mensaje que Jesús fue preso y condenado a muerte. El incomodó el sistema, y el sistema se defendió, usando la fuerza contra Jesús, pues El quería la ley al servicio de la vida, y no lo contrario.
Jesús y la Biblia. Los fariseos criticaban a Jesús en nombre de la Biblia. Jesús responde y critica a los fariseos usando la Biblia. El conocía la Biblia de memoria. En aquel tiempo, no había Biblias impresas como tenemos hoy en día. En cada comunidad había sólo una Biblia, escrita a mano, que quedaba en la sinagoga. Si Jesús conocía tan bien la Biblia, era señal de que, durante aquellos 30 años de su vida en Nazaret, había participado intensamente en la vida de la comunidad, donde el sábado se leían las Escrituras. ¡Nos falta mucho para que tengamos la misma familiaridad con la Biblia y la misma participación en la comunidad!
Para la reflexión personal
• El sábado es para el ser humano, y no viceversa. ¿Cuáles son los puntos de mi vida que he de cambiar?
• Aún sin tener la Biblia en casa, Jesús la conocía de memoria. ¿Y yo?
Oración 🙏🏼
Señor Jesús:
Hoy en este día quiero pedir por cada una de esas personas a la cual aún tu palabra no le llega, te pido de manera personal que a través de cada uno de nosotros que somos portadores de tu palabra nos llenes de los dones de tu Santo Espíritu para poder transmitirlo a nuestros hogares, trabajo y amistades, gracias por todos los dones que nos das y que por tu gracia se conviertan en fruto para bien de la humanidad.
Amén.
Contemplación 🎑
Para la contemplación sugiero las palabras de Jesús a sus discípulos:
«El sábado se hizo para el hombre y no el hombre para el sábado; así que el Hijo del hombre es señor también del sábado».
Acción 🏃🏻♂️
Rezar por todos en estos días en especial por todos los afectados por la explosión del volcán submarino y los afectados por la ola de covid.