Lectio Divina por Rosanna Quiróz Marte de República Dominicana
Viernes III Semana de Cuaresma Ciclo B
Soy Rosanna Quiroz Marte de República Dominicana. Comparto el ejercicio espiritual de la Lection Divina.
Invocación al Espiritu Santo:
Gracias te damos Señor por tu palabra; queremos conectar con ella, por eso te pedimos la gracia de tu Santo Espiritu; avívalo en nosotros para que podamos escuchar tu voz a través de este texto que queremos leer y meditar. Por Jesucristo Nuestro Señor.
Amén.
1-Lectura: Les invito a ver y escuchar el video que contiene el Evangelio de hoy:
El Señor, nuestro Dios, es el único Señor y lo amarás.
Lectura del Santo Evangelio según Marcos 12, 28b-34
En aquel tiempo, un escriba se acercó a Jesús y le preguntó:
¿Qué mandamiento es el primero de todos? Respondió Jesús:
Primero es: «Escucha, Israel, el Señor, nuestro Dios, es el único Señor: amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma con toda tu mente, con todo tu ser». El segundo es este: «Amarás a tu prójimo como a ti mismo». No hay mandamiento mayor que estos. El escriba replicó: Muy bien, Maestro, tiene razón cuando dices que el Señor es uno solo y no hay otro fuera de Él; y que amarlo con todo el corazón con todo el entendimiento y con todo el ser, y amar al prójimo como a uno mismo vale más que todo los holocaustos sacrificios. Jesús, viendo que había respondido sensatamente, le dijo:
No estás lejos del Reino de Dios. Y nadie se atrevió a hacerle más preguntas.
Palabra del Señor.
2. Meditación:
Hoy podemos decir que no volveremos a llamar a la obra de nuestras manos. (Profecía de Osea 14, 2-10)
Conviértete al Señor tuyo porque tropezaste por tu pecado.
(Salmos 80, 6-17)
Yo soy el Señor, el Señor, Dios tuyo: escucha mi voz.
Evangelio (San Marcos 12, 28b-34)
De los mandamientos más importantes es: «amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente, con todo tu ser».
3- Oración:
¡Oh Dios! Que maravilloso es saber que soy más amada que cualquiera de tus hijos de este mundo, pero esto se olvida con frecuencia, termino haciendo lo que no te agrada. Dame Señor, ese amor con el que tú te nos das sin esperar nada a cambio.
Quiero dar testimonio de tu amor para todo los que nos rodean.
4- Contemplación:
Porque mi casa será casa de oración para toda la comunidad.(ls 56,7).
5- Acción:
¿A qué nos comprometemos con Dios?
Debo hacer un cambio notable en mi vida, que cuando las personas me vean vean a una hija amada de Dios. Amando sin medida a todos los que nos rodean sin hacer accesión de personas. Que mi cambio sea evidente.
Con tu grupo: Haremos una revisión entre lo que hacemos y lo que somos, dejando siempre aflorar el amor de Dios y el mandamiento de amar con el corazón, con toda nuestra alma, con todo nuestro ser. Y al prójimo como a nosotros mismos.