LECTIO DIVINA
22° SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO
SÁBADO 7 DE OCTUBRE DE 2024 – CICLO B
Francis Castillo de Nicaragua ✍🏻🇳🇮
PASO 0: INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
Ven, Espíritu Creador,
visita las almas de tus fieles
llena con tu divina gracia,
los corazones que creaste.
Tú, a quien llamamos Paráclito,
don de Dios Altísimo,
fuente viva, fuego,
caridad y espiritual unción.
Tú derramas sobre nosotros los siete dones;
Tú, dedo de la diestra del Padre;
Tú, fiel promesa del Padre;
que inspiras nuestras palabras.
Ilumina nuestros sentidos;
infunde tu amor en nuestros corazones;
y, con tu perpetuo auxilio,
fortalece la debilidad de nuestro cuerpo.
Aleja de nosotros al enemigo,
danos pronto la paz,
sé nuestro director y nuestro guía,
para que evitemos todo mal.
Por ti conozcamos al Padre,
al Hijo revélanos también;
Creamos en ti, su Espíritu,
por los siglos de los siglos
Gloria a Dios Padre,
y al Hijo que resucitó,
y al Espíritu Consolador,
por los siglos de los siglos. Amén.
PASO 1: LECTURA ¿QUÉ DICE EL TEXTO?
Evangelio según San Lucas 6, 1-5
1 Un sábado, Jesús estaba caminando por un campo sembrado y sus discípulos comenzaron a arrancar las espigas, y se las comían restregándolas con las manos. 2 Entonces algunos fariseos preguntaron: ¿Por qué hacen lo que está prohibido hacer en sábado?
3 Jesús les respondió: “¿No han leído lo que hizo David cuando él y sus compañeros tenían hambre? 4 Entró en la casa de Dios, tomó los panes ofrecidos a Dios, que está prohibido comer con la excepción de los sacerdotes, los comió y también se los dio a los que estaban con él”.
5 también Jesús les dijo: “El Hijo del Hombre es el Señor del sábado”.
PALABRA DEL SEÑOR
En este texto bíblico encontramos a Jesús en una escena de la vida cotidiana en el que con sus discípulos van cansados y hambrientos, pero también enseñando a hacer el bien, incluso en sábado, aunque esté bien esté prohibido por la ley.
PASO 2: MEDITACIÓN ¿QUÉ ME DICE EL TEXTO?
1. ¿Por qué los fariseos cuestionan a Jesús?
2. ¿Qué quiere decirnos Jesús al decir “El Hijo del Hombre es el Señor del sábado”?
3. ¿Jesús nos invita a ser cumplidores de la ley o a ser testigos de la misericordia?
El Papa Francisco nos dice: Se preocupaban por la ley, descuidaban la justicia. Se preocuparon por la ley, descuidaron el amor. Eran modelos, eran los modelos, y Jesús sólo encuentra una palabra para estas personas: hipócritas. Por un lado, vas por todo el mundo buscando prosélitos, buscas y luego cierras la puerta. Hombres de cerrazón, hombres tan apegados a la ley, a la letra de la ley, no a la ley, porque la ley es amor; sino a la letra de la ley, que siempre cerró las puertas de la esperanza, del amor, de la salvación […] Este es el camino que nos enseña Jesús, totalmente opuesto al de los doctores de la ley. Y este camino del amor a la justicia conduce a Dios, en cambio, el otro camino, el de apegarse sólo a la ley, a la letra de la ley, conduce a la clausura, conduce al egoísmo. El camino que va del amor al conocimiento y al discernimiento, a la plenitud, conduce a la santidad, a la salvación, al encuentro con Jesús. En cambio, este camino conduce al egoísmo, al orgullo de sentirse justo, a esa santidad entre comillas. apariencias, ¿verdad? Jesús les dice a estas personas: «Pero a vosotros os gusta ser vistos por la gente como hombres de oración, de ayuno…», ser vistos, ¿no? Por eso Jesús dice al pueblo: «Pero haced lo que dicen, pero no lo que hacen». Jesús se acerca: la proximidad es precisamente la prueba de que vamos por el verdadero camino. Porque es precisamente el camino que Dios eligió para salvarnos: la cercanía. Se acercó a nosotros, se hizo hombre. (Santa Marta, 31 de octubre de 2014)
PASO 3: ORACIÓN ¿QUÉ LE DIGO YO AL SEÑOR?
Señor Jesús, tú eres el dueño del sábado, danos la fuerza y la alegría para seguir siempre tus caminos y ser coherentes con nuestra fe, a hacer siempre, a ser misericordiosos como tú lo eres. A ser siempre misericordiosos como tú eres misericordiosos con nosotros. Danos la paz de hacer siempre tu voluntad. Amén.
Paso 4: ACCIÓN ¿A QUÉ ME COMPROMETO HOY?
A revisar mi forma de vivir la fe y si estoy mal, pues vivir los valores del Evangelio para ser testimonio de Cristo Nuestro Señor.