Evangelio del día – Lectio Divina Lucas 11, 15-26

Lectio Divina por Cristian Buiani de Argentina

Lectio Divina del Viernes 14 de octubre del 2017

Buen día hermanos. Nos unimos en la oración con la Palabra del Señor.

🕊Invoquemos juntos al Espíritu de Vida. Ven Espíritu Santo, ven a nuestras vida, infunde tu los en nuestros corazones, para que guiados por ti podamos comprender tu santa palabra.

📖Lectura del día:

Lectura del santo evangelio según san Lucas (11,15-26):

En aquel tiempo, habiendo echado Jesús un demonio, algunos de entre la multitud dijeron:«Si echa los demonios es por arte de Belzebú, el príncipe de los demonios.»
Otros, para ponerlo a prueba, le pedían un signo en el cielo.
Él, leyendo sus pensamientos, les dijo: «Todo reino en guerra civil va a la ruina y se derrumba casa tras casa. Si también Satanás está en guerra civil, ¿cómo mantendrá su reino? Vosotros decís que yo echo los demonios con el poder de Belzebú; y, si yo echo los demonios con el poder de Belzebú, vuestros hijos, ¿por arte de quién los echan? Por eso, ellos mismos serán vuestros jueces. Pero, si yo echo los demonios con el dedo de Dios, entonces es que el reino de Dios ha llegado a vosotros. Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su palacio, sus bienes están seguros. Pero, si otro más fuerte lo asalta y lo vence, le quita las armas de que se fiaba y reparte el botín. El que no está conmigo está contra mí; el que no recoge conmigo desparrama. Cuando un espíritu inmundo sale de un hombre, da vueltas por el desierto, buscando un sitio para descansar; pero, como no lo encuentra, dice: «Volveré a la casa de donde salí.» Al volver, se la encuentra barrida y arreglada. Entonces va a coger otros siete espíritus peores que él, y se mete a vivir allí. Y el final de aquel hombre resulta peor que el principio.»

Palabra del Señor.

¿Qué dice la Palabra?

La falta fe, la incredulidad y la negación crecen y surgen en el evangelio de hoy. La gente en el tiempo de Jesús niegan que el poder que Él hace provenga de Dios. Jesús se defiende de un modo simple, el mal no puede ser derribado con el mal… El bien supera al mal, y el mal paraliza al bien.
¿Qué me dice la Palabra?
«El Reino reino de Dios ha llegado a ustedes»: ¿Noto el sentido de urgencia en estas palabras, siento la invitación a comprometerme completamente con el Reino?
¿Cuáles son mis demonios ¿Puedo nombrar alguno de ellos?

Oración:
Señor, me doy cuenta
de que todo lo que me pides
es un simple ‘sí’,
un simple acto de confianza
para que, de ese modo,
la elección que tú haces por mí
dé frutos en mi vida.
No quiero estar tan ocupado
con mi forma de vivir,
que no me dé cuenta siquiera
de que Tú estás conmigo,
más cerca que ningún otro.
No quiero ser ciego a los gestos de amor
que vienen de tus manos,
ni sordo a las palabras amorosas
que vienen de tu boca.
Quiero verte cuando caminas conmigo
y escucharte cuando me hablas.