Lectio Divina por José Carlos Rivera Rivera de Honduras
INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
Ven Espíritu Santo, ven iluminador del Padre, ilumina mi mente y abre mi corazón, para comprender y entender el mensaje de vida, que quieres regalarnos para el día de hoy, ayúdame a poder poner en práctica cada una de tus enseñanzas mi Señor, y siempre poder cumplir tu voluntad y no la mía.
Amén.
LECTURA: Del Evangelio de según San Lucas 10, 1-12
Después de esto, el Señor eligió a otros setenta y dos discípulos y los envió de dos en dos delante de él, a todas las ciudades y lugares a donde debía ir.
Les dijo: «La cosecha es abundante, pero los obreros son pocos. Rueguen, pues, al dueño de la cosecha que envíe obreros a su cosecha. Vayan, pero sepan que los envío como corderos en medio de lobos. No lleven monedero, ni bolso, ni sandalias, ni se detengan a visitar a conocidos.
Al entrar en cualquier casa, bendíganla antes diciendo: La paz sea en esta casa.
Si en ella vive un hombre de paz, recibirá la paz que ustedes le traen; de lo contrario, la bendición volverá a ustedes. Mientras se queden en esa casa, coman y beban lo que les ofrezcan, porque el obrero merece su salario. No vayan de casa en casa. Cuando entren en una ciudad y sean bien recibidos, coman lo que les sirvan, sanen a los enfermos y digan a su gente: El Reino de Dios ha venido a ustedes.
Pero si entran en una ciudad y no quieren recibirles, vayan a sus plazas y digan:
Nos sacudimos y les dejamos hasta el polvo de su ciudad que se ha pegado a nuestros pies. Con todo, sépanlo bien: el Reino de Dios ha venido a ustedes.
Yo les aseguro que, en el día del juicio, Sodoma será tratada con menos rigor que esa ciudad.
Palabra del Señor.
2. MEDITACIÓN
La misión Evangelizadora, aquellas personas que no conocen de Cristo, ha sido la principal tarea desde que Cristo vino a nosotros, y hasta el día de hoy, sigue siendo lo primordial, como seguidor de Cristo. Después de haber leído el texto, quiero que cada uno en su interior pueda meditar sobre las siguientes preguntas:
1. ¿Me considero un discípulo Evangelizador enviado por Dios, o considero que eso es tarea solo de las personas consagradas religiosamente? ¿Por qué?
2. Dios Padre a todos nos ha encomendado una misión. Como cristiano católico, ¿cómo estoy llevando a cabo esta misión encomendada?
3. ¿Soy una persona transmisora de paz y alegría, como lo pide Cristo, o me gusta generar conflicto y duda en los demás?
4. ¿Qué dificultades o retos estoy dispuesto a asumir, para poder cumplir con la misión y voluntad de Dios?
Ahora medita en tu interior.
3. ORACIÓN
Gracias Padre, por un día más de vida que me regalas, por las bendiciones recibidas de ti. Padre a la luz de esta palabra que he leído y meditado, quiero que me concedas la fortaleza y perseverancia que necesito, para seguir llevando y cumpliendo con alegría la misión cristiana que me has encomendado. Señor, en los momentos de tristeza sé tú mi alegría, en los momentos de desánimo, sé tú mi aliento, en los momentos de dificultad, sé tú mi refugio, en los momentos de cólera y enojo, sé tú mi paz y tranquilidad Padre. En tus manos encomiendo mi vida y servicio pastoral Padre, ayúdame a poder cumplir siempre tu voluntad Señor.
Amén.
4. CONTEMPLACIÓN
Elige un versículo o frase que más te haya llamado la atención o con la que más te sientas identificado, y contémplala varias veces en tu interior, para que resuene la Voz del Padre en ella.
«Al entrar en cualquier casa, bendíganla antes diciendo: La paz sea en esta casa. Si en ella vive un hombre de paz, recibirá la paz que ustedes le traen; de lo contrario, la bendición volverá a ustedes.»
5. ACCIÓN ¿A qué te comprometes con el Señor?
Para culminar con la lectio, haz un compromiso con Dios, aquello que quieras ir cambiando en tu vida, algo concreto y realizable.