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Lectio Divina por Exalta Gabriela De La Barra de Bolivia
Sábado VI Semana de Pascua Ciclo B
Invocación al Espíritu Santo:
Ven Espíritu Dios, Espíritu Santo de amor, que bajaste para quedarte entre nosotros, ven con tu fortaleza. Conviértete en valentía, quita el sosiego de mi alma para adentrarme en la palabra que me da vida en Cristo nuestro Señor.
Evangelio según san Juan 16,23b-28
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«En verdad, en verdad os digo: si pedís algo al Padre en mi nombre, os lo dará.
Hasta ahora no habéis pedido nada en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestra alegría sea completa. Os he hablado de esto en comparaciones; viene la hora en que ya no hablaré en comparaciones, sino que os hablaré del Padre claramente.
Aquel día pediréis en mi nombre, y no os digo que yo rogaré al Padre por vosotros, pues el Padre mismo os quiere, porque vosotros me queréis y creéis que yo salí de Dios.
Salí del Padre y he venido al mundo, otra vez dejo el mundo y me voy al Padre».
1ER. PASO: LECTURA ¿Qué dice el texto?
Jesús sabiendo que pronto tendría que dejar su forma de hombre, les va dando insumos de vida a sus discípulos, enseñanzas que cambian todos los corazones. Hoy les invita a que no tengan miedo, y con la confianza de padre, le pidamos a Dios en su nombre, «pidan y se les dará». Jesús es claro, a pesar de que Dios padre conoce todo, sabe de todo, espera ansioso y con paciencia que seamos capaces de abrirnos hacia Él, con amor, confianza y humildad para pedir, y sucede el milagro del «reconocimiento de Dios» como padre de misericordia. Este «pedir» es un recordatorio de que Jesús se aleja no para irse, sino que estará hasta el final y en cada momento a nuestro lado, al igual que un amigo, un hermano, ya que en todo momento y por nuestra humanidad, ante cualquier situación ya sea buena o mala, pedimos al más cercano algo.
Pidamos en el nombre de Jesús con amor y alegría ya que todo es posible si mantenemos esta conexión vigente con el padre a través de la oración.
2DO. PASO: MEDITACIÓN ¿Qué nos dice el texto?
El Evangelio es preciso, un recordatorio de que no nos quedamos solos y desamparados, que a pesar de todo y para todo con confianza en el Padre y a través del hijo todo es posible, siempre y cuando hagamos conocer nuestras necesidades. Reconocernos débiles, sin fuerzas y necesitados es la muestra más grande de humanidad, por lo que inmediatamente saber que tenemos un padre de amor y hablarle además de pedirle, completa el ciclo de diálogo de confianza.
Preguntémonos:
• ¿A quién recurro de manera inmediata cuando tengo una necesidad pequeña o grande?
• ¿En mi vida cotidiana trato de mantener un lazo de confianza con Dios a través de la oración, para que sea mi socorro y mi auxilio?
3ER. PASO: ORACIÓN ¿Qué le respondo al Señor?
Señor Jesús gracias por tu promesa de quedarte entre nosotros, gracias por dejarnos el camino para la felicidad extrema, gracias por dejarnos a un padre de amor, gracias por enseñarnos a orar y como acercarnos al Padre, para que en los momentos más difíciles de nuestra humanidad podamos seguir en la confianza y esperanza plena de tu amor. Mi Señor tú que todo lo hiciste desde tu cercanía de amigo, y que permitiste que te conozcamos revelando tu alma y Espíritu entre nosotros, no me dejes solo y ayúdame a que este amor y entrega hacia el Padre crezca día a día y se refleje en la confianza tanto de mi oración como de mis actos. Amén.
4TO. PASO: CONTEMPLACIÓN ¿cuál fue la frase que más resonó en mí?
“El padre les concederá todo lo que pidan en mi nombre»
5TO. PASO: Acción: ¿A qué me comprometo con Dios?
– Me comprometo a fortalecer la comunicación con Dios por medio de la oración, para que nuestra relación crezca en confianza y amor (de mi parte).
– Me comprometo a hablar y manifestar el amor del padre siendo ejemplo de oración viviente para mi familia.
– Me comprometo a pedir a Dios amor, confianza y poner todas mis necesidades humanas en sus manos.
