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Lectio Divina
0. INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
Ven Espíritu Santo ilumina nuestros corazones con la fuerza infinita de tu luz y sabiduría, y prepáranos para este encuentro con Jesús. En el centro de nuestras familias para que nuestras realidades, sean reflejo de las realidades de la Sagrada Familia de Nazaret. Donde la figura de María cobra en su Sí una invitación a nosotros, a responder de la misma manera a este encuentro íntimo con Dios Padre.
Espíritu Divino, abre nuestros entendimiento a tu Palabra eterna y llénanos de la alegría de Jesús.
Amén.
1. Lectura: ¿QUÉ DICE EL TEXTO?
Lectura del santo Evangelio según san Lucas 19, 45-48
En aquel tiempo, Jesús entró en el templo y se puso a echar a los vendedores, diciéndoles:
«Escrito está: “Mi casa será casa de oración”; pero ustedes la han hecho una “cueva de bandidos”».
Todos los días enseñaba en el templo.
Por su parte, los sumos sacerdotes, los escribas y los principales del pueblo buscaban acabar con él, pero no sabían qué hacer, porque todo el pueblo estaba pendiente de él, escuchándolo.
+ Palabra de Dios.
Podemos creer y decir con toda propiedad que Jesús fue ESCUCHADO y SEGUIDO por varios grupos de personas que eran sus discípulos o seguidores, pero con esa misma propiedad sabemos que no todos lo querían, y por ello, buscaban la forma de provocarlo, pero no fue lo suyo una predicación preparada, muy medida y convenientemente pronunciada, lo que hizo que las franquezas del bcorazón se vieran alejadas de muchas formas de los intereses políticos y mezquinos de quienes lo querían ver caer, por lo que buscan la forma de hacerle reventar, para ejemplo, el Evangelio de Lucas, cuyo texto también recogen los otros sinópticos: «Escrito está: “Mi casa es casa de oración”; pero ustedes la hicieron una “cueva de bandidos”» (19,46) Frente a esta soflama la respuesta no se hace esperar: «Los sumos sacerdotes, los escribas y los principales del pueblo buscaban acabar con él» (v.47) Los personajes que buscan liquidar al Maestro: la máxima expresión del poder religioso, cultural y político de Israel. Y esto se sigue perpetuando en el tiempo. Quien molesta es blanco de ser eliminado, por ello, la importancia de su ministerio y el cumplimiento de lo escrito en las Sagradas Escrituras.
2. Meditación: ¿Qué me dice el texto?
Te invito ahora a que reflexiones sobre esta pregunta:
¿Mi Templo de habitación del Espíritu Santo es en verdad un templo de oración?
Sino, ¿Cuáles son los tipos de mercaderes que me dominan? (demonios) que no te dejan actuar con bien?
Al escuchar la Palabra de Jesús: ¿te sientes cogido por su enseñanza como la multitud que estaba pendiente de sus labios? Es decir, ¿prestas la debida atención a la escucha del Evangelio para unirte a Cristo?
3. Oración: ¿Qué le respondo al Señor?
¡Te adoro, Señor, porque estás vivo y te unes a mí, en mi fragilidad, en mi debilidad, en mi pobre existencia pero adorándote y alabándote me santifico, me renuevo y me purifico! ¡Gracias, Señor, porque tu Corazón palpita en el Sagrario que se convierte en mi morada, en mi refugio, en mi lugar de encuentro contigo! Llena mi corazón de tu presencia, y saca de mi templo todo lo que me distrae de ti y hace de tu casa un ruido exorbitante, que solo me aleja cada vez más de ti, limpia con tu amor, lo que no sea por ti y para ti, amén.
4. Contemplación, ¿Cómo interiorizo la Palabra de Dios en mi vida?
Mientras buscas la frase del texto que más te ha llamado la atención, te invito a meditar en la siguiente canción para que nos ayude a alimentarnos de Jesús pan de vida.
5. Acción: ¿Qué debo hacer para seguir a Jesús?
Hago como propósito de sacar a uno de los mercaderes de mi vida para dejar que ÉL domine mi vida. Y voy midiendo en qué cosas ha cambiado mi vida. PLo anoto y dejo que el Señor se manifieste.
Que el señor te bendiga
EP.
