Lectio Divina
Erinson de Jesús Bustamante de Venezuela ✍🏻🇻🇪
O. Invocación al Espíritu Santo
Invoquemos al Espíritu de Jesús,
Que nos llama y elige.
Invoquemos su Espíritu,
Que nos sana y libera.
Invoquemos este Espíritu el poder de sanar a todos los seres del sufrimiento.
Amén.
Evangelio según san Lucas 6, 12-19
12 En aquellos días sucedió que Jesús subió a una montaña para orar y pasó toda la noche orando a Dios. 13 Cuando amaneció, llamó a sus discípulos y eligió doce de ellos a quienes llamó apóstoles: 14 Simón, a quien llamó Pedro, y a su hermano Andrés; a Jacobo y a Juan; a Felipe y a Bartolomeo; 15 a Mateo y a Tomás; a Jacobo\, hijo de Alfeo, y a Simón, llamado el Zelote; 16 a Judas, hijo de Jacobo, y a Judas Iscariote, que vino a ser el traidor.
17 Jesús bajó de la montaña con ellos y se detuvo en una llanura con muchos de sus seguidores y una gran multitud de toda Judea, de Jerusalén y de las costas de Tiro y Sidón. Habían venido a escuchar a Jesús y a ser sanados de sus enfermedades.
18 Aquellos que eran atormentados por espíritus impuros también eran sanados, 19 y todos querían tocar a Jesús porque de Él salía un poder que sanaba a todos.
Palabra del Señor.
(TRADUCCIÓN DEL NUEVO EVANGELIZADOR)
1. Lectura
¿Qué dice el texto?
¡Que texto tan sencillo!
Jesús es un hombre de Dios -y Dios hecho hombre-. Permanece en constante relación con su Padre, previo a momentos cumbres importantes le busca, le escucha, dialogan. Es durante la noche que se pone en oración.
Jesús no actúa en nombre propio sino en nombre de su Padre, gracias a ello, llama por su nombre a hombres y mujeres del pueblo para seguirle. Lo hace de mañana, es decir, con luz, despierto; en definitiva guiado por su Padre. Respecto a la elección de discípulos, se mencionan solo hombres. Podemos suponer que estaban con él, aquella noche.
La montaña es lugar de encuentro con Dios, allí Jesús les llama. Pero junto a ellos baja, es decir, les introduce en el mundo, en el lugar donde acontece la realidad. Allí se describe un discipulado más amplio: una muchedumbre de distintos lugares.
La gente sigue, hace por lo que dice y hace. Lo reconocen como alguien que sana. Hay un poder en Jesús que sana a todas las personas. El poder de Jesús no es un problema de show, espectáculos o magia. Este poder alude al amor, su modo de ser y relacionarse ha transformado la vida de doce que ha llamado y se han decidido seguir, pero también la de hombres y mujeres, que encuentran en él alguien que sana realmente, alguien cuyo paso transforma todo.
•¿A dónde se retira Jesús?
•¿Que hace allí?
•¿A quiénes llama Jesús? ¿Cómo lo hace?
•¿A qué lugar lleva a quienes ha llamado? •¿Qué pasa con la gente que le sigue?
2. Meditación
¿Qué me dice el texto?*
Jesús se retira a solas de noche a encontrarse con su Padre. ¿También yo tengo lugar para el silencio y la escucha de Dios en mi vida, en mi cotidianidad y en mis noches oscuras?
Despierto, iluminado al amanecer llama por su nombre a doce y estos le siguen. ¿Estoy yo atento a la llamada continua que Jesús me hace? ¿He escuchado mi nombre?
Hay muchas personas que siguen a Jesús, porque hay algo que Él tiene que les ha transformado. ¿Reconozco, acepto y comparto mi experiencia de Jesús con otros que le siguen de modos distintos?
Jesús baja de la montaña con quienes ha escogido ¿Soy capaz de bajar a la llanura de la vida y reconocer lo que acontece hoy en el mundo, la sociedad y la iglesia?
Muchas personas son sanadas por Jesús. Su amor es un poder que trasforma todo a su paso. ¿Me dejó yo sanar por él? ¿Tengo el poder de amar a las demás personas con el amor de Jesús?
3. Oración
¿Qué le digo al Señor?
Agradece a Jesús por llamarte por su nombre.
Gracias Jesús por…
Pídele ser fiel a la realidad de hoy.
Aquí estoy para…
Mira a Jesús y di con confianza: Sáname con tu amor.
4. Contemplación
¿Qué me resuena del texto?
“De él salía un poder que sanaba a todos».
5. Acción
¿A qué me compromete el texto?
– A identificar realidades de mi entorno familiar, laboral, social o estudiantil y formas concretas de ayudar a transformarlas.
– A reconocer personas concretas que sufren y apoyar con necesidades para su sanidad física, emocional, espiritual.
Pidamos al Padre de Jesús y Padre Nuestro, que con confianza y nuestro compromiso podamos trasformar las dificultades del mundo de hoy y seguirle coherentemente: Padre Nuestro.
Con cariño, su hermano Erinson de Jesús, desde Venezuela.