Amanda Mora Elizondo, Ministerio Juvenil Sal y Luz, RCC. San José, Pérez Zeledón, Costa Rica; nos comparte sus comentarios del Capítulo 9, Número 284, de la Exhortación Apostólica Christus Vivit del Papa Francisco.
284. Este silencio no es una forma de aislamiento, porque «hay que recordar que el discernimiento orante requiere partir de una disposición a escuchar: al Señor, a los demás, a la realidad misma que siempre nos desafía de maneras nuevas. Sólo quien está dispuesto a escuchar tiene la libertad para renunciar a su propio punto de vista parcial o insuficiente […]. Así está realmente disponible para acoger un llamado que rompe sus seguridades pero que lo lleva a una vida mejor, porque no basta que todo vaya bien, que todo esté tranquilo. Dios puede estar ofreciendo algo más, y en nuestra distracción cómoda no lo reconocemos»[158].