Lectio Divina por Jesús Roel Castillo de México
Invocación al Espíritu Santo 🕊
Espíritu Santo, eres el alma de mi alma,
te adoro humildemente.
Ilumíname, fortifícame, guíame, consuélame.
Y en cuanto corresponde al plan eterno Padre Dios revélame tus deseos.
Dame a conocer lo que el Amor eterno desea en mí.
Dame a conocer lo que debo realizar.
Dame a conocer lo que debo sufrir.
Dame a conocer lo que con silenciosa modestia y en oración, debo aceptar,
cargar y soportar.
Sí, Espíritu Santo, dame a conocer tu voluntad y la voluntad del Padre.
Pues toda mi vida no quiero ser otra cosa que un continuado perpetuo Sí a los
deseos y al querer del eterno Padre Dios.
Lectura 📖
Evangelio según San Marcos 2,1-12.
Jesús volvió a Cafarnaún y se difundió la noticia de que estaba en la casa.
Se reunió tanta gente, que no había más lugar ni siquiera delante de la puerta, y él les anunciaba la Palabra.
Le trajeron entonces a un paralítico, llevándolo entre cuatro hombres.
Y como no podían acercarlo a él, a causa de la multitud, levantaron el techo sobre el lugar donde Jesús estaba, y haciendo un agujero descolgaron la camilla con el paralítico.
Al ver la fe de esos hombres, Jesús dijo al paralítico: «Hijo, tus pecados te son perdonados».
Unos escribas que estaban sentados allí pensaban en su interior:
«¿Qué está diciendo este hombre? ¡Está blasfemando! ¿Quién puede perdonar los pecados, sino sólo Dios?»
Jesús, advirtiendo en seguida que pensaban así, les dijo: «¿Qué están pensando?
¿Qué es más fácil, decir al paralítico: ‘Tus pecados te son perdonados’, o ‘Levántate, toma tu camilla y camina’?
Para que ustedes sepan que el Hijo del hombre tiene sobre la tierra el poder de perdonar los pecados
-dijo al paralítico- yo te lo mando, levántate, toma tu camilla y vete a tu casa».
El se levantó en seguida, tomó su camilla y salió a la vista de todos. La gente quedó asombrada y glorificaba a Dios, diciendo: «Nunca hemos visto nada igual».
Meditación 🧎♂️
El Evangelio de hoy nos muestra a unos individuos haciendo un hueco por el techo de una casa para acceder a Jesús, y permitir que un paralítico se encontrara con Él. La gente impedía su paso. Hay muchas cosas y mucha gente que nos impiden acceder al perdón, a la palabra de sanación (Como los escribas del Evangelio) ¡Cuánta liberación hay con la palabra perdón! A veces se llevan cargas innecesarias en la vida, que no nos permiten ponernos en pie y caminar.
No sé si he tenido el suficiente valor de buscar a Dios en la multitud, ni tampoco sé si el coraje para vivir la fe ha sido el necesario. Sólo le pido a Dios que me libere de las cadenas del miedo que me atrapa, y de la cobardía que paralizó mis manos, mi mente y mi corazón, para enarbolar con valentía la palabra única que siempre he pronunciado: “Cristo habita en mí, como la vida misma, como el relato divino que Dios ha querido pronunciar con mis pasos en esta humanidad”.
Hoy tal vez esa multitud está representada también en la pandemia que vivimos y que ha muchos les impide llegar a Dios, pero recordemos que hoy más que nunca los medios digitales son los que nos acercan a Dios también a través de lo que realizamos en la Lectio Divina o en las transmisiones hoy somos esas cuatro personas que llevamos al inválido a Dios, ese inválido que puede ser nuestro hermano enfermo, nuestro hermano adulto mayor, nuestro hermano vulnerable, esté lectura también me hace en reflexionar acerca de ¿que estamos haciendo por nuestro prójimo para acercarlo a Dios?, es momento de ser activos en llevar la palabra de Dios, seamos esos hombres y mujeres que llevemos y compartamos la Fe a nuestro prójimo.
Oración 🙏🏼
Para este momento hagamos una oración por nuestra Fe
Señor, haz que mi fe sea pura, sin reservas, y que penetre en mi pensamiento, en mi modo de juzgar las cosas divinas y las cosas humanas.
Señor, haz que mi fe sea libre, es decir, que cuente con la aportación personal de mi opción, que acepte las renuncias y los riesgos que comporta y que exprese el culmen decisivo de mi personalidad: creo en Ti, Señor.
Señor, haz que mi fe sea cierta: cierta por una congruencia exterior de pruebas y por un testimonio interior del Espíritu Santo, cierta por su luz confortadora, por su conclusión pacificadora, por su connaturalidad sosegante.
Señor, haz que mi fe sea fuerte, que no tema las contrariedades de los múltiples problemas que llena nuestra vida crepuscular, que no tema las adversidades de quien la discute, la impugna, la rechaza, la niega, sino que se robustezca en la prueba íntima de tu Verdad, se entrene en el roce de la crítica, se corrobore en la afirmación continua superando las dificultades dialécticas y espirituales entre las cuales se desenvuelve nuestra existencia temporal.
Señor, haz que mi fe sea gozosa y dé paz y alegría a mi espíritu, y lo capacite para la oración con Dios y para la conversación con los hombres, de manera que irradie en el coloquio sagrado y profano la bienaventuranza original de su afortunada posesión.
Señor, haz que mi fe sea activa y dé a la caridad las razones de su expansión moral de modo que sea verdadera amistad contigo y sea tuya en las obras, en los sufrimientos, en la espera de la revelación final, que sea una continua búsqueda, un testimonio continuo, una continua esperanza.
Señor, haz que mi fe sea humilde y no presuma de fundarse sobre la experiencia de mi pensamiento y de mi sentimiento, sino que se rinda al testimonio del Espíritu Santo, y no tenga otra garantía mejor que la docilidad a la autoridad del Magisterio de la Santa Iglesia. Amén.
Contemplación 🎑
Para el momento de la contemplación me quedo con esta frase: Al ver la fe de esos hombres, Jesús dijo al paralítico: «Hijo, tus pecados te son perdonados».
Acción 🏃🏻♂️
Hoy para el momento de la acción los invito a ser activos a través de nuestras redes sociales y compartir la palabra de Dios, desde nuestro hogar para con los demás, y de manera oportuna los que podamos asistir de forma presencial a una misa ofrezcamos la sagrada comunión por todos aquellos hermanos enfermos por esta pandemia.