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Lectio Divina por Alex Cerna de Honduras
Invocación al Espíritu Santo
Ven Espíritu Santo, tu que llenas de fuego el corazón de los que buscan a Jesus.
Dirige tu mirada, Señor , sobre nosotros y nuestras familias, para que movidos por el Espíritu Santo seamos testigos tuyos.
Suscita en nuestro corazón la capacidad de escuchar tu vos Y de acoger con Fe tu Palabra.
Amén.
Lectura del santo evangelio según san Mateo (11, 20-24)
Entonces Jesús comenzó a recriminar a aquellas ciudades donde había realizado más milagros, porque no se habían convertido. «¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si los milagros realizados entre ustedes se hubieran hecho en Tiro y en Sidón, hace tiempo que se habrían convertido, poniéndose cilicio y cubriéndose con ceniza. Yo les aseguro que, en el día del Juicio, Tiro y Sidón serán tratadas menos rigurosamente que ustedes. Y tú, Cafarnaún, ¿acaso crees que serás elevada hasta el cielo? No, serás precipitada hasta el infierno. Porque si los milagros realizados en ti se hubieran hecho en Sodoma, esa ciudad aún existiría. Yo les aseguro que, en el día del Juicio, la tierra de Sodoma será tratada menos rigurosamente que tú».
Palabra del Señor.
Lectura: ¿Qué me dice el texto?
En este Evangelio podemos ver como Jesús le recrimina a las ciudades de Corazain, Betsaida y Cafarnaun, que son ciudades cercanas al mar de Galilea, ciudades donde Jesús predicaba y hacía milagros y ni aun asi creian, ni se convertian pero si estos milagros se hubieran hechos en las ciudades de Tiro ,Sidon y Sodoma ellos quizá se hubieran convertido.
Y no es que en Tiro, Sidon y Sodoma no se haya predicado, allí los profetas anunciaban y motivaban a la conversión pero no hicieron caso, pero a pesar de ello serán tratado con menos rigor que los que despreciaron y rechazaron a Jesus
Meditación: ¿Qué nos dice Dios en el texto?
Dios nos confronta de manera clara nuestro propio proceso de conversión, porque nosotros si hemos visto y somos testigos de sus milagros, puesto que todos los dias nos bendice y nos da vida.
Ese proceso de conversión es cada día, todos los dias de nuestra vida, y más aún nos llama a ser promotores de la conversión de nuestros pueblos, tomando propias las palabras de apóstol San Pablo ¡Ay, de mí, si no evangélizo… !¡Ay, de mi si no evangelizo…!
Está lectura me hace preguntarme:
¿Cómo va mi proceso de conversión ?
¿Mis acciones van de acuerdo con mi conversión?
¿Cómo puedo yo, ayudar a la conversión de mis hermanos?
Oración: ¿Que le respondo a Dios?
Señor, Jesús te pido perdón por las veces que no he sido digno de ti, porque inclusive yo también te he despreciado y reprochado tu voluntad.
Hoy te pido, que me ayudes a seguirte, ha dejar mi pecado atras y caminar junto a ti; ayúdame a ser instrumento tuyo para anunciar la Buena Nueva a todos nuestros pueblos.
Amén.
Contemplación: ¿Cómo interiorizo la Palabra de Dios?
Me quedo pensando repetidamente en la frase » Ay de ti Corozain, Ay de ti Betsaida»
Acción: ¿A qué me comprometo con Dios?
1. Anunciar la Buena Nueva de Dios.
2. Trabajar en mi proceso de conversión.
