Lectio Divina por Luxandra Pineda de Colombia
INVOCACIÓN
Ven Espíritu Santo infunde tu gracia en nuestros corazones, ven a encender en nuestras vidas tu fuego abrasador, ven sopla en lo más profundo de nuestro ser y llénanos de tu presencia santificadora Señor.
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS 6,6-11
Un sábado, entró Jesús en la sinagoga y se puso a enseñar. Había allí un hombre que tenía la mano derecha paralizada. Los escribas y los fariseos estaban al acecho para ver si curaba en sábado, y encontrar de qué acusarlo. Pero El conocía sus pensamientos y dijo al hombre de la mano atrofiada: “Levántate y ponte en medio”. Y, levantándose, se quedó en pie. Jesús le dijo: “Le voy a hacer una pregunta: ¿Qué está permitido en sábado?, ¿Hacer el bien o el mal, salvar una vida o destruirla?”. Y, echando en torno una mirada a todos, le dijo: “Extiende tú mano”. Él lo hizo y su mano quedó restablecida. Pero ellos, ciegos por la cólera, discutían qué había que hacer con Jesús.
¿Qué dice el texto?
Hoy Jesús quiere confrontar a los fariseos, quienes dicen ser rectos y cumplidores de la ley. “Les voy a hacer una pregunta: ¿Qué está permitido en sábado?, ¿Hacer el bien o el mal, salvar una vida o destruirla?”.
Si hoy el Señor nos hiciera la misma pregunta, ¿qué le responderíamos? Cada día el Señor conoce nuestros pensamientos y sabe quién es cada uno de nosotros, por eso en este pasaje bíblico él mira la Fe que tenemos y la que profesamos.
MEDITACIÓN: ¿Qué me dice a mí el texto?
Encontramos en estos seis versículos del Evangelio: que Jesús nos invita a no detenernos en acercarnos a Él para pedirle que nos libere, nos sane espiritualmente y físicamente para estar siempre en pie, levantados, dejándonos guiar por el camino que Él tiene para cada uno de nosotros, no debemos detenernos en este caminar sino dejar que el Señor realice su obra en nosotros. Y pedirle a Él que todo lo que se haga sea siempre haciendo el bien para salvar una vida.
¿Cómo nos comprometeríamos con el Señor a cambiar las actitudes que no son propias de los que decimos ser hijos De Dios?
¿Qué palabra le ayudaría como herramienta para no cometer injusticias ante los ojos De Dios?
ORACIÓN: ¿Qué le respondo a Dios?
Señor Jesús, presentamos cada aspecto de nuestras vidas para que tú tomes todo y revele a nuestro corazón lo que te hace sonreír. Haz de nosotros personas prudentes que sepan diferenciar los momentos en los que hay que tomar decisiones, para que, tomado de tu mano, podamos eliminar la levadura vieja y asumir con responsabilidad la tarea que nos presentas en nuestro diario vivir. Amén.
CONTEMPLACIÓN: ¿Cómo interiorizo la Palabra de Dios?
Los invito a reflexionar esta palabra en el día a día de sus vidas
“Levántate y ponte en medio”. Y, levantándose, se quedó en pie.
ACCIÓN: ¿A qué me comprometo?
Tengamos presente que el Señor nos invita a que nos mantengamos firmes para ser cumplidores de la ley para no acomodarla a nuestros propios intereses.